Daegu, Surcorea, 20 ago (PL) Daegu, la cuarta ciudad en importancia de Surcorea, es empero hoy la capital mundial del atletismo, donde converge por estos días la crema y nata del deporte rey.
A seis días del comienzo del Mundial de Atletismo, toda la ciudad vive un expectante ambiente olímpico, y muchos salen a la calle con esperanzas de toparse alguna celebridad mundial del campo y pista.
Por lo pronto, en el emblemático arco que surca Manpyeong pueden verse varios rostros de moda, con imágenes dinámicas distinguibles desde cualquier punto de la célebre intersección del distrito Buk.
Entre los ídolos representados destaca el jamaicano Usain Bolt, quien hizo historia en el Mundial previo, con aquel 9.58 segundos en 100 metros que dos años después todavía se antoja increíble.
El carismático atleta llegó hace tres días, visiblemente afectado por el “jet lag” pero este sábado ya lució más él mismo, proclamando con su habitual sonrisa que si arranca bien, nadie podrá rebasarlo.
Mientras, en las cercanías del río Geumho comienza a llenarse la Villa de los atletas, construida en un entorno natural propicio para aliviar el stress de la competencia, si acaso ello fuera posible.
Con 528 cuartos y nueve edificios de 13 a 15 plantas, la villa cuenta además con dos pistas y áreas de entrenamiento, y una Plaza de los Campeones con las facilidades básicas y algunos lujos.
Las unidades pueden acomodar hasta tres mil 500 personas, e incluso camas auxiliares para los atletas de mayor talla, y los restaurantes ofrecen bufés orientales, occidentales e islámicos.
Ya ondean las 212 banderas de los miembros de la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo, cuyo presidente Lamine Diack, inauguró la villa, a solo seis minutos del estadio.
Los organizadores de Daegu 2011 confían en romper algunos records de Berlín 2009, como los ocho mil millones de televidentes o los ingresos de 80 millones de dólares para la ciudad.
A su vez, si la gloria fuera insuficiente, los atletas tienen un incentivo de 100 mil dólares por récord mundial para dejarse el alma en el estadio, sin contar las medallas y los premios en metálico.
Fuente: atletismoenmexico.com
Publicado el 20 de Agosto del 2011
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